ningún artículo seleccionado
La importancia del agradecimiento
¿Por qué agradecer?
No hay duda de que el agradecimiento nos hace más felices. Porque la gratitud, como define el diccionario, es “el sentimiento que nos obliga a estimar el beneficio o favor que se nos ha hecho o ha querido hacer, y a corresponder a él de alguna manera”. Es un ejercicio que nos sitúa en el aquí, en el presente, y hace que sepamos ver el lado positivo de todas las situaciones. Repasemos algunos de los principales beneficios que obtenemos del agradecimiento:
· los demás lo perciben, porque la gratitud nos convierte en personas empáticas, más afectuosas, más cercanas[1]
· aumenta nuestra resiliencia: nos volvemos más fuertes cuando debemos afrontar situaciones traumáticas[2]
· nos hacemos más solidarios, más comprometidos con las personas y situaciones a los que podemos ayudar[3]
· además, el agradecimiento es terapéutico: se ha demostrado que reduce la ansiedad y la depresión[4]
· nos ayuda a dormir mejor: conciliamos el sueño con mayor facilidad y dormimos más. Al despertar, nos sentiremos más frescos y despejados y eso contribuirá a empezar el día positivamente[5].
· resistimos mejor los momentos de estrés, nos hace más fuertes y felices[6].
· también los niños y sobre todo los adolescentes se benefician del agradecimiento: los que lo practican, disfrutan más de la vida y gestionan mejor sus emociones[7].
¿Cómo empezamos con el agradecimiento?
Es cuestión de práctica: cuanto más lo hagamos, encontraremos más por lo que dar gracias. Os damos unas ideas para convertir el agradecimiento en un hábito:
· Ten una hucha de agradecimiento: “ahorra” esos buenos motivos por los que agradeces, escribe al menos uno al día en un pequeño trozo de papel y ve metiéndolo en un bote o hucha. Así, Cuando tengas un mal día, podrás echar mano de esos “ahorros” repasarlos y ver lo “rico” que eres. Esta actividad es muy recomendable también para los niños.
· Antes de dormir, repasa esas dos o tres cosas destacables del día por las que dar las gracias. Poco a poco y con la práctica tu mente será capaz de rescatar esos momentos sin mucho esfuerzo, y te hará sentir muy bien.
· Siempre que tengas oportunidad, disfruta solo del momento: el primer café de la mañana cuando te levantas, el paseo de la tarde, la puesta de sol desde la ventana… solo vive el momento, observa a tu alrededor, sé contemplativo y agradece.
La palabra “gracias” la decimos varias veces a lo largo del día. No se trata de usarla solo por educación, sino que cuando la pronunciemos, pensemos en su significado y agradezcamos sinceramente, siendo conscientes de ello. Todos seremos más felices, tanto el que agradece como el que recibe el agradecimiento.
[1] Bartlett MY, DeSteno D. Gratitude and prosocial behavior: helping when it costs you. Psychol Sci. 2006 Apr;17(4):319-25.
[2] Wood AM, Froh JJ, Geraghty AW Gratitude and well-being: A review and theoretical integration, Clinical Psychology Review 2010
[3] Wood AM, Joseph S, Lloyd J, Atkins S. Gratitude influences sleep through the mechanism of pre-sleep cognitions. Journal of Psychosomatic Research 2009; 66:43-8
[4] Fofonka L, Campos L, Tozzi C. Positive Psychology and Gratitude Interventions: A Randomized Clinical Trial. Front Psychol. 2019; 10: 584.
[5] Froh J, Fan J, Emmons RA, Bono G, Huebner ES, Watkins P. Measuring Gratitude in Youth: Assessing the Psychometric Properties of Adult Gratitude Scales in Children and Adolescents. Psychological Assessment 2011